Historia
Cada integrante de Ripiao Kingz, tiene su propia historia, camino musical recorrido, Influencias, escuela y al mismo tiempo especialidad. Es por esto que la combinación de Fernando “Fercho La Voz” Guzmán, Edwin Torres y Ray “Chino” Díaz” ha logrado el nacimiento de un grupo muy original con un sonido particular y que definitivamente se diferencia de sus colegas en la ciudad. Con esta premisa Ripiao Kingz ha llegado para ocupar su propio lugar en la industria musical latina.
Ray ‘Chino’ Díaz siguió la tradición de su padre y abuelo que le enseñaron desde muy chico a tocar la tambora y güira dominicana. En cumpleaños, bautizos y reuniones de familia, ‘Chino’ fue aplicando todo lo que aprendió de forma autodidacta con esos ritmos. Sus hermanos tenían gustos musicales tan disímiles como The Beatles oElvis, algunas de sus primeras influencias, pero el amplio sonido de Nueva York fue penetrando sus oídos y de esta forma se dejó seducir por el hip-hop de Run DMC, Sugar Hill Gang, LL Cool J, el jazz de John Coltrane, los sonidos fusión latinos de Tito Puente o Chick Corea, el disco de Donna Summer, la salsa de la Fania All Stars, Celia Cruz, Héctor Lavoe, Willie Colón o Rubén Blades. Y con esas bases su principal curiosidad comenzó por la percusión tradicional y folclórica. Decidió estudiar piano para tener una educación y apreciación musical completa. Además la admiración de iconos latinos como Tito Puente lo motivó a buscar ese estilo que combinara el sonido latino con elementos modernos. Esa inquietud personal lo llevaron a explorar sonidos, fusiones y al mismo tiempo perfeccionar sus técnicas de percusión y la güira que tiene ese toque e ingrediente perfecto para los ritmos tropicales originarios de la música dominicana.
Mientras seguía sus estudios, combinaba su tiempo participando en otros proyectos musicales pero siempre con la idea de crear su propia banda o grupo. Y finalmente con Ripiao Kingz se cumple ese sueño, el de crear un sonido original, basándose en la música típica que se pueda llevar a lugares diferentes con el aporte de arreglos y armonías bien construidas.
El segundo socio de este proyecto es Edwin Torres. Nacido en República Dominicana , llego a Long Island a los tres años de edad. Su abuelo fue determinante en su apreciación musical. Mientras sus amigos de escuela oían diferentes géneros o practicaban instrumentos tradicionales, Edwin se inclinó por las lecciones de acordeón de su abuelo. Simplemente se convertía en esa conexión especial con él, su pasado y su tierra. Desde muy chico le sedujo el merengue típico, y en cada una de sus vacaciones en la isla, aprovechaba para seguir sumergiéndose en ese género que tanto le gustaba. Sinónimo de alegría, del sabor de su República Dominicana, el acordeón fue ese vínculo permanente a su herencia cultural. Iba creciendo y se enfrentaba al reto de no encontrar clases formales de acordeón, así que decidió tratar con el violín o saxofón, fue un corto romance que pronto fue quebrado por el acordeón. Mientras en la escuela oía a Jay Z, Biggie Smalls, el merengue no se apartaba de su vida y ya pertenecía a su ADN musical y cultural. Cuando finalizó la secundaria comenzó a estudiar mecánica automotriz y a tocar ocasionalmente con varios grupos a nivel local. Fue una llamada de “Chino” quien tocaba en un grupo con su tío, que lo volvió a encarrilar al mundo de la música profesional, su destino natural. Así junto con “Chino” comenzaron las clases de piano y a convertir la música en su profesión y no en un hobby.
Y a este dúo se sumó la voz que faltaba para completar esta junta de talentos, artistas y sobre todo amigos. Fernando “Fercho La Voz” Guzmán nació en República Dominicana y creció en Brooklyn. De niño su banda sonora estuvo conformada por canciones de Juan Luis Guerra, Anthony Santos, Fernandito Villalona, Boyz II Men, Luther Vandross o Frankie J. Tratando de emular los sonidos de poderosas voces del R&B, Fernando descubrió su talento natural muy temprano, a los cinco años de edad. Así comenzó participar en concursos y festivales infantiles, siempre logrando ser uno de los más aplaudidos. La bachata fue su ritmo natural, además combinando en su sonido lo aprendido y oído en grandes voces de Motown y R&B. De esta manera creo su registro y estilo, con una gran respuesta del público en sus primeros grupos locales. Sus jornadas en la escuela y universidad siempre fueron largas por tener que cumplir con otra de sus pasiones: el béisbol. Como segunda base también se destacó e incluso logro un lugar en el equipo del BMCC (Borough of Manhattan Community College). Pero una lesión en el hombro lo obligó a retirarse y aunque se frustro su carrera deportiva, ese evento lo llevo a tomar la música muy en serio.
Y así ha surgido este gran grupo. Tres talentos con origines similares y diferentes. Con una educación musical diversa que les ha permitido crear un auténtico y original nuevo sonido. Tal como lo explican “Fercho”, Edwin y “Chino” el primer beat de cada una de sus canciones invitara a bailar, a pasarla bien, a olvidarse de los problemas y el mundo exterior. Cada canción es una invitación a divertirse y transformar una fiesta o concierto en una poderosa experiencia musical.
Un consejo, no se olvide de tener los zapatos más cómodos para asistir al próximo concierto de los Ripiao Kingz.
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Alexis Brugal
